LA IMPORTANCIA DE INVOLUCRAR A LAS FAMILIAS EN EL PROCESO EDUCATIVO

En el mes de mayo del año 2022, Soledad Acuña, la titular del Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, presentó su obra titulada «El día que ir a la escuela fue noticia”.

A lo largo de dicha publicación, Acuña comparte su vivencia liderando el Ministerio en medio de la pandemia, detallando los momentos más cruciales en los que trabajó constantemente por la reapertura de las escuelas, tras el cierre de estas por decisión del gobierno nacional.

La Ministra destaca la relevancia que adquirieron las familias en este proceso. Desde las primeras páginas, se resalta que las familias asumieron un papel más activo en la educación, sumándose al reclamo para que sus hijos e hijas pudieran regresar a las aulas.

Acuña enfatiza que el retorno a la escuela también tenía una dimensión de género. En su libro, argumenta que, según estudios, en la mayoría de los hogares con niños/as en edades de nivel inicial o primario, eran las mujeres quienes quedaban a cargo de su cuidado, renunciando a sus carreras profesionales.

La reincorporación a las clases presenciales fue, en gran medida, posible gracias a la intervención de las familias, quienes expresaron su preocupación por la educación de sus hijos. En este contexto, se unieron y participaron activamente con el objetivo de ser escuchados, buscando restituir la prioridad en la educación. Soledad Acuña y Horacio Rodríguez Larreta se dedicaron durante todo el 2020 a asegurar la reapertura de las escuelas en la Ciudad.

A pesar de la resistencia del gobierno nacional, la Ministra y el Jefe de Gobierno encontraron respaldo en la sociedad, consolidando su reclamo por el regreso a las aulas.

EL EMERGIMIENTO DE «PADRES ORGANIZADOS» Y SU RELACIÓN CON EL MINISTERIO DE EDUCACIÓN DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES

En este sentido, la obra destaca la iniciativa conocida como «Padres Organizados», un colectivo conformado por padres y madres que percibieron cómo la educación remota y el aislamiento afectaban el desarrollo educativo de sus hijos.

Soledad Acuña explica que el Ministerio de Educación de la Ciudad priorizó el constante diálogo con la sociedad, manteniendo un contacto directo con la realidad para idear propuestas más ajustadas a los desafíos reales que imponía la educación.

Asimismo, expone cómo las preocupaciones planteadas por las familias, sumadas a las investigaciones y análisis realizados por el equipo de Acuña, revelaron que los estudiantes enfrentaban problemas de concentración y atención durante las clases a distancia. Esto dificultaba su seguimiento del contenido educativo a través de dispositivos electrónicos, generando obstáculos en su proceso de aprendizaje.

Soledad Acuña narra que, después de que los padres y madres se organizaron para elevar sus demandas en favor de la educación de sus hijos, ella optó por establecer contacto con la organización para escuchar sus planteamientos. “Me puse al día con la información que mi equipo estaba produciendo: los informes de la Comunidad Educativa Conectada, los relevamientos sobre la salud mental de adolescentes y las mesas con especialistas de infancia. Tenía la temperatura de lo que sucedía hacia dentro de la comunidad educativa pero no era suficiente. Debíamos seguir consultando a los diferentes actores con relevamientos y más actividades de cercanía. Había que escuchar la opinión de las familias”.

En este sentido, explica: “Mi intención era escucharlos para sumar otras voces. En un momento en que la apertura de las escuelas no parecía la posición reinante, aprendimos que las mayorías silenciosas tenían que hacerse oír más fuerte. Me preguntaba cómo podíamos apoyar su reclamo para hacerlo aún más visible (…) Nuestro plan para poder garantizar una vuelta progresiva a las aulas era comenzar por los estudiantes de los grados más avanzados. Sobre todo los chicos que estaban cursando séptimo grado del primario o quinto del secundario y se acercaban al final de su ciclo lectivo. Teníamos que definir prioridades sobre la base de quienes más lo necesitaban: los que habían abandonado la escuela y aquellos que estaban por egresar”.

Finalmente, explica que el reclamo de los padres y las madres se hizo escuchar difundiendose en toda la sociedad: “El debate por las escuelas encendió una mecha en la ciudadanía. El ruido de las voces que pedían por la apertura de las aulas comenzó a escucharse fuerte y claro. Cada vez eran más los actores de la sociedad civil que se unían en un mismo reclamo”.

Enquire now

Give us a call or fill in the form below and we will contact you. We endeavor to answer all inquiries within 24 hours on business days.